¿Quiénes Somos?

Jóvenes, quédense y ayúdenme a cambiar a Venezuela

Javier Bertucci - Presidente de EL CAMBIO

Sobre Nosotros

¿Quiénes Somos?

Somos Esperanza Por El Cambio (Partido El Cambio) un partido demócrata cristiano que emergió de la sociedad civil organizada, en apoyo a la Campaña Presidencial de Javier Bertucci en el año 2018; inicialmente fue un grupo de electores que lograron postular a Bertucci en las elecciones del 20 de mayo como presidente de Venezuela. Dicha campaña, recorrió el país casi tres veces, con el llamado “sopazo”, actividades de Acción Social que contaba con atención médica, actividades didácticas para niños, atención a personas en situación de calle, entrega de platos de sopa y el recorrido y discurso por parte del candidato Bertucci.

give

Solidaridad

thumbs-up

Honestidad

dove

Libertad

Recuperando la premisa de una democracia social, que se encamine a la recomposición de esta sociedad con la participación y el protagonismo de todos.

¿Puedo unirme?

Sí, El Cambio lo conforman personas de distintas edades, estratos sociales, razas, género, pensamiento, profesión u ocupación; de todas las regiones del país; y que han puesto el bienestar de Venezuela como prioridad en sus vidas. Cada día somos muchos más.

Nuestra

Filosofía

Creemos, firmemente, en una visión cristiano humanista de la política

Creemos, firmemente, en una visión cristiano humanista de la política, donde el poder o la autoridad que otorga un cargo público, debe usarse para el servicio y bienestar del pueblo y no para la satisfacción personal de quien lo posee; y en respeto a la dignidad humana.

Entendemos, la necesidad de sumar voluntades en favor del país

Entendemos, la necesidad de sumar voluntades en favor del país, logrando una coexistencia pacífica de todos los venezolanos, y la inclusión e integración para la construcción de futuro.

Ofrecemos, una nueva visión ética de la política

Ofrecemos, una nueva visión ética de la política, donde principios y valores de vida, rijan la actuación de nuestra militancia, dirigentes, candidatos, así como la generalidad de la gestión que desempeñen todos nuestros representantes que ocupen algún cargo de elección popular o gobierno.

Defendemos, el ejercicio pleno de la ciudadanía

Defendemos, el ejercicio pleno de la ciudadanía, el respeto y garantía a los derechos sociales y políticos que la población posee, así como al cumplimiento de sus deberes; sin rechazo infundado en género, creencia, condición económica, nivel de instrucción o cualquier otra forma acostumbrada de exclusión social.

Nuestros

Principios Fundamentales

Nos definimos como un partido doctrinario e ideológico

Nos definimos como un partido doctrinario e ideológico, que orienta sus acciones en principios y valores fundamentalmente demócratas cristianos. Creemos en un profundo sentido moral y ético de la política, como expresión del servicio público, y de amor por nuestra patria Venezuela, declaramos nuestro amor por el pueblo venezolano y por la lucha indetenible en poder construir un mejor país en democracia por medio de la búsqueda del bien común y de la verdad.

Nuestras bases ideológicas se basan en la tradición del humanismo y la doctrina demócrata cristiana

Nuestras bases ideológicas se basan en la tradición del humanismo y la doctrina demócrata cristiana con un profundo sentido social, que denuncia constantemente las injusticias del mundo moderno promoviendo la lucha por una nueva sociedad, a partir del mandato cristiano del amor al prójimo, expresado en los valores de la libertad, la justicia social y la solidaridad.

Basados en la doctrina del humanismo cristiano

Basados en la doctrina del humanismo cristiano, nos afirmamos personalistas, por lo que reconocemos la dignidad de toda persona, haciéndonos garantes del respeto por la vida y la persona humana, en su dimensión física, psíquica, espiritual y social, como el centro de nuestras motivaciones de lucha. Reconocemos la naturaleza espiritual y trascendente del ser humano, concebimos la vida humana como una identidad continua desde la fecundación hasta la muerte natural. Reconocemos la vida y la interacción con el medio ambiente, respetando todo principio en defensa del medio ambiente.

Reconocemos de forma indiscutible la defensa por la dignidad humana

Reconocemos de forma indiscutible la defensa por la dignidad humana, manifestada irrestrictamente en la defensa de los derechos humanos y repudiando cualquier linea a favor de la pena de muerte. Nos alineamos irreversiblemente a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y a todos aquellos pactos, tratados y declaraciones vigentes cuyo fundamento principal sea en pro de la dignidad humana, sin hacer  excepción de genero, raza, credo y étnia.

Consideramos y defendemos la familia como la primera y más importante base de la sociedad

Consideramos y defendemos la familia como la primera y más importante base de la sociedad, a la vez como base social para el desarrollo de la persona, garante de la vida en común y consecuente para generar una sociedad justa y equitativa. Reconocemos la familia como el espacio esencial para el cuidado de los hijos y la protección entre sus miembros, lugar adecuado y oportuno para la formación de valores y continuidad de la identidad nacional cultural. La familia es por excelencia espacio para la concientización de los derechos y deberes sociales de los individuos.

Reconocemos la existencia y el ejercicio de iglesias y comunidades religiosas

Reconocemos la existencia y el ejercicio de iglesias y comunidades religiosas, como parte de nuestra tradición cultural y de buenas costumbres, basadas en los principios y fundamentos de respeto por la vida. Defendemos la libertad constitucional de culto y la igualdad jurídica de las iglesias instituidas dentro del marco y amparo de las leyes vigentes. Somos contrarios a toda forma de discriminación debido a diferentes creencias religiosas.

Como valores fundamentales: promulgamos la libertad, la honestidad, y la solidaridad

Como valores fundamentales: promulgamos la libertad, la honestidad, y la solidaridad como esenciales en nuestro ejercicio por reflejar una sociedad democrática, igualitaria y libertaria. Creemos en el desarrollo espiritual, social, político y económico del ser humano por medio de la fomentación de estos valores.

Creemos en el pluralismo

Creemos en el pluralismo, como resultado del principio de la Libertad por lo que buscamos la expresión de los diversos sectores, con sus posiciones e intereses propios. Sostenemos la necesidad de integrar esas diversas visiones e intereses en torno a un proyecto común de país. No apoyamos las integraciones  basadas en exclusiones y sectarismos, o alejadas del principio de la tolerancia.

Nuestro principio en lo político, nos define como Demócratas Cristianos

Nuestro principio en lo político, nos define como Demócratas Cristianos, con un ferviente compromiso con la democracia Venezolana, su representatividad, sus instituciones, la manifestación del poder originario por medio del ejercicio electoral como garante democrático y la no violencia en los procesos de entendimiento político. Abiertamente nos oponemos a toda degeneración de democracia, como la oclocracia o fenómenos de seudo-democracias como el populismo, el fascismo y el autoritarismo. Creemos en el conservadurismo prudente, siempre que se permitan espacios para mejorar y profundizar en el desarrollo de la democracia.

En la filosofía económica, Sostenemos que el libre mercado tiene una posición importante

En la filosofía económica, Sostenemos que el libre mercado tiene una posición importante para el desarrollo económico de Venezuela; pero para garantizar el sentido humano de la economía requiere la intervención prudente y contralora del Estado cuando sea necesario, buscando así disminuir las desigualdades e injusticias sociales. En nuestro proyecto sugerimos La Economía Social de Mercado o la concepción del Libre Mercado con sentido Social, estimando políticas fiscales acordes a la necesaria regulación de los mercados financieros, buscando fortalecer siempre a los sectores productivos de la nación, así como la generación de programas sociales basados en la solidaridad y la subsidiariedad, no para generar dependencia en los beneficiados sino para  garantizar su reinserción en el aparato  productivo.